Retos extremos

Aventureros y deportistas ponen a prueba los límites del ser humano sometiéndose a desafíos que parecen imposibles.

Atravesar el Sáhara a pie: La ‘Marathon des Sables’ es una exigente prueba consistente en recorrer durante 6 días unos 250 kilómetros, lo que equivale aproximadamente a una maratón diaria, en pleno desierto del Sáhara en condiciones climáticas extremas y cargando con todo el equipo y alimentos necesarios. Se celebra anualmente desde 1986, dos años después de que el francés de 28 años Patrick Bauer hiciera una travesía, completamente solo, de 12 días y 350 kilómetros a pie entre las poblaciones de Tamanrasset e In Guezam, con una mochila de 35 kilos a la espalda llena de agua y comida.

Escalar ‘El Capitán’: Ubicada en la parte norte del Parque Nacional Yosemite, en California (EE.UU.), esta formación rocosa vertical es idolatrada por los mejores escaladores del mundo. Se trata de un monolito granítico de 900 metros de altura al que puede accederse caminando a través de una vía excursionista, pero el desafío para los más osados y experimentados escaladores es trepar por su pared desnuda.

De expedición en la Patagonia: La ‘Patagonian Expedition Race’ se desarrolla en el punto más austral del mundo, si exceptuamos la Antártida. Los participantes, que compiten en equipos mixtos de cuatro atletas, deben atravesar cientos de inhóspitos kilómetros en medio de un duro e impredecible clima, equipados únicamente con brújula y mapa para orientarse y encontrar la meta. Kayak de mar, orientación, bicicleta de montaña, trekking y escalada son las principales disciplinas que hay que dominar para enfrentarse a esta prueba.

Vuelta al mundo a vela en solitario: La ‘Vendée Globe’ es una de las regatas de altura más exigentes del mundo. Los participantes deben dar la vuelta al mundo en velero, completamente en solitario y sin recibir ningún tipo de ayuda ni asistencia. El recorrido, que comienza y termina en la costa francesa, atraviesa el Atlántico Norte hasta el Sur, pasa por la Antártida y cruza los Océanos Pacífico e Índico antes de regresar al Atlántico. El récord de tiempo lo ostenta el navegante francés François Gabart, quien en 2013 completó la regata en 78 días.

La carrera de la muerte: “No proporcionamos apoyo, no te decimos cuándo empieza, ni cuándo acaba, ni qué te encontrarás. Queremos que fracases y te animamos a abandonar en cualquier momento”. Con esta declaración de principios, los organizadores de la ‘Death Race’, que se celebra en las Green Mountains de Vermont (EE.UU.) dejan claro que es una de las pruebas más duras del mundo. A los participantes les puede tocar cortar madera, cargar ladrillos, superar alambres de espino, nadar en piscinas heladas o cualquier otra prueba que puedan (o no) imaginarse.