Vuelta a Mallorca en 10 faros

Una ruta por el litoral a través de algunas de sus torres de luz más emblemáticas.

Arrancamos en Palma visitando el faro de Porto Pi, el segundo más antiguo de España y del que en el año 1300 ya tenemos referencias. Este faro acoge una de las mejores exposiciones de señales de Europa.

A continuación ponemos rumbo al sur para detenernos en el faro de Cap Blanc, desde donde disfrutar de unas maravillosas vistas panorámicas del Mediterráneo a pie de acantilado. A lo lejos, en los días más claros, podemos avistar desde Mallorca otro faro mítico: el de la isla de Cabrera.En el pintoresco pueblo marinero de Porto Colom, su pequeño faro reluce en medio del bello puerto natural.

Ya en el norte de la isla encontramos el faro de Alcanada, ubicado en un islote de la Bahía de Alcúdia. Un poco más al oeste, al final de una carretera con espectaculares vistas, el faro de Formentor se erige majestuoso sobre los afilados acantilados.

Siguiendo la ruta de la Sierra de Tramuntana llegamos a Sóller, un hermoso pueblo lleno de historia en el que conviven su faro antiguo, azotado a lo largo de los años por los temporales, y el moderno, algo más resguardado.

Ya en el extremo suroeste, nos embarcamos hacia la isla de Dragonera, que cuenta con tres faros, uno de los cuales es el más alto de toda España. Precisamente este hecho dificultaba su visibilidad en los días de niebla, lo que obligó a sustituirlo por otros dos, uno en cada punta del islote.