1. Basura cero. El barco es tu hogar en el agua y todos los desechos deben quedar en él. Nada se vierte sobre el mar. Es importante, además, reducir el uso del plástico durante la travesía, y cerciorarse de tener a mano un contenedor de basura. Si hay fumadores en la embarcación, deben prestar atención y sumo cuidado dónde arrojan la colilla de los cigarros.
2. Usa un protector solar eco. Cuando navegues o quieras broncearte en la playa, elige siempre protectores solares respetuosos con el medioambiente. El protector solar eco-friendly protege la piel y al mismo tiempo no contamina el agua. Este tipo de cremas cuenta con la garantía de una prueba científica, carece de oxibenzona, activo químico que pone en peligro la fauna marina y los arrecifes de coral, y en la etiqueta contiene un sello oficial con la leyenda “Eco”.
3. Bucea como observador. Bucear los fondos marinos y sumergirse en su profundo universo, extenso y misterioso, genera adrenalina por la fauna y flora que habita en ellos. Para beneficiar el medioambiente es preciso adoptar el rol de mero observador, sin interrumpir ni pertubar la vida marina.
4. Atención con la posidonia. Está prohibido fondear y lanzar un ancla sobre esta planta, endémica del Mediterráneo y señal inequívoca de la calidad del agua. Su función es fijar los sedimentos en el fondo marino gracias a su entramado de tallos horizontales y rizomas. Evita la erosión, ejerce presión contra el suelo y amortigua el oleaje que llega a la costa. La tecnología puede ayudarte mucho en este caso. Si el patrón no sabe dónde hay praderas de posidonia, existen aplicaciones móviles precisas que indican cuáles son las zonas aptas para el fondeo. En el caso de que navegues sin patrón, es necesario que te informes bien antes de emprender la ruta.
5. Diseño sostenible. Las embarcaciones ecológicas también son más o menos sostenibles según el diseño. En este sentido, cuanto más aerodinámico sea el barco, es posible aprovechar las ráfagas de viento utilizando menor cantidad de combustible.
6. Utiliza barcos ecológicos. Las embarcaciones constituyen una causa importante de contaminación al medio ambiente. El transporte marítimo representa el 3% de las emisiones de CO2, por eso los barcos ecológicos emergen como una necesidad imperiosa. En este sentido, varios modelos referentes funcionan con fuentes de energía alternativa, como la solar o la eólica para alimentar los motores. Greenline Yachts es un fabricante que ideó yates con un sistema de propulsión híbrido formado por un motor diésel y otro eléctrico basado en baterías de litio. Se complementan con placas solares ubicadas en la cubierta. Skysails, por su parte, es la compañía que ha conseguido poner a punto embarcaciones ecológicas y eficientes basadas en la energía eólica.
7. Limpieza de sentinas. Los líquidos de sentina son un residuo peligroso para el medio ambiente marino. El puerto donde amarres debe estar acondicionado para recoger tus residuos de forma segura y respetuosa con el mar. Las sentinas son afluentes que se generan en la navegación, reparación o mantenimiento del barco. En general, proceden del agua de mar y son una mezcla de aceite, detergente y combustible. Se acumulan en el interior del casco, en la parte baja. ¡Es muy importante no vaciarlas durante la navegación!